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Éxodo 17. Mejorar, lograr bendiciones de Dios; Él no abandona a los fieles.

Escribe Javier R. Cinacchi en
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Hagamos un devocional cristiano, pensando en Dios, y buscando mejorar nuestra relación con Él.
Es muy interesante, lo que les ocurría en aquel entonces a los israelitas en el libro de la Bíblia, Éxodo 17 (lo tiene aquí mismo en el recuadro). Lo mismo nos ocurre a muchos, sin darnos cuenta en la actualidad. Salvo que cambian cuestiones relacionadas con la época, como la forma de opresión, la intensidad, y el grado de tolerancia de cada uno.
Resulta, el pueblo de Dios, se habían adaptado y estaban complicados, esclavos en Egipto, sirviendo a los egipcios, que cuando vieron que prosperaban demasiado, los oprimían. Dios quiere que estén mejor, obviamente. Les va fatal y tienen que trabajar en extremo y ni pueden tener hijos en libertad, sin lugar a dudas necesitan un cambio. Pese se quejan continuamente de su líder que busca guiarlos, me refiero a Moisés, y también se quejan de Dios en cuanto temen.


Es importante en los devocionales diarios tener memoria de todo. Pensemos. ¿Cómo está la vida? ¿Es libre? ¿Cuántas horas trabaja? ¿Bajo qué condiciones? ¿Cuánto está progresando? ¿Sus expectativas para su futuro? ¿Y su relación con Dios? ¿Cuánto por día pasa buscando su compañía? Usted sabe que Dios es inmenso, pues no se conforme con poco. Usted sabe que Dios lo ama y si usted también lo ama, buscará estar con Él. Estar con Dios es por ejemplo orar, devocionales, leer la Biblia, cantar alabanzas a Dios, hacer lo que a Él le agrada, y no hacer lo que le desagrada.

El pueblo de Dios iba rumbo a la gran bendición: Hacerse una nación grande en la tierra prometida. El camino no era fácil, generalmente el camino del progreso no es fácil. Pero es mejor emprenderlo. Con Dios de su lado ¿porqué no progresar? Pero ante las complicaciones se quejaban:

¿Está Dios con nosotros? ¿Dónde está Dios? ¿Nos trajiste acá para morir? Incluso murmuran diciendo que antes estaban mejor, una vez que habían salido de Egipto...

Sospecho que esta pregunta, similares; o las situaciones del entorno para que se generen, se dan en algún momento en todo cristiano. Se puede quejar y perder grandes bendiciones, o buscar a Dios y que se manifieste su poder. Algunos peor aún, se enojan con Dios, y hacen lo contrario.



Es difícil llegar a algunas bendiciones; allí es infaltable la fe. Los israelitas vieron grandes milagros de Dios, los mismos que en Éxodo 17 están quejándose vieron los milagros de las plagas, observan una columna de humo y fuego que los guiaba y protege, ven abrirse el Mar rojo y cerrarse sobre sus enemigos, comen comida que desciende del cielo. Es decir no eran “nuevos en la fe” Y aún dudan en sus corazones ¿no es ilógico tanta duda? Y sin embargo muchas veces nos ocurre o estamos a punto de decir: ¿Está Dios con nosotros? ¿Dónde está Dios?

Dios está siempre, Él no deja de ser. usted esté seguro de estar en el camino que Dios desea, aleje el pecado de su vida. Me refiero al verdadero pecado por ejemplo: robo, engaño, ira, maldad, depravaciones, homosexualidad, pedirle a otro Dios o rendirle homenaje a otro en lugar de al Padre, Jesucristo, y Espíritu Santo; abuso de menores, vicios que lo lleven a la muerte (una cosa es tomar un vaso de vino, y otra litros), trabajos de magia, adivinación, hay muchos pecados que se podrían mencionar. No me refiero a “tonteras” tales como lo que expresa la letra de una canción que le agrada como suena algo de esa y quiere escuchar de vez en cuando; o la forma en que le guste vestirse (mientras que no se vista como un sacerdote pagano todo bien) ¡Por favor piense! Pero no me quiero ir de tema, esto lo menciono porque quiero generarle confianza también en usted mismo.

No sea débil. Ore, esfuércese por mejorar, estudie, trabaje, y hágalo todo con la ayuda de Dios. Y no se olvide de lo que a veces pasa: Dios nos ejercita, prueba. Salga aprobado, y no se ponga a llorar diciendo que Dios lo ha abandonado. Dios ha dado lo mejor por usted, a Jesucristo, se ha dado a sí mismo, ¡y de qué manera!

Mi hemano... si en algún momento falta el agua y tiene sed: Confíe en Dios, piense, vea si está todo bien en su vida, busque mejorar; y a Dios ámelo aunque tenga alguna sed. Le sugiero antes que se pase esta hora en que leyó esto, pedirle a Dios su guía, ayuda, liberación; y decirle que lo ama. Dele las gracias a Dios, seguro que lo ha librado de muchas. A Dios hay que darle las gracias y amarlo, aunque uno se sienta morir.